lunes, 6 de octubre de 2008

Tengo rodilla, no tengo rodilla

Je. En el blog no suelo hablar de lo que me pasa en mi vida personal, pero ésta es una ocasión especial. Al menos así lo considero. El viernes pasado me operaron de la rodilla. No quería. Tenía miedo. Con uno de mis amigos hacía bromas (quizá pesadas para algunos) como: pensar que me cortarían la pierna, que quedaría paralítico o que moriría. De hecho, ese mismo amigo ya estaba apartándose mi disco duro, pues ahí tengo respaldada toda mi música. Aunque a mí me preocupaba más el paradero de mi "breve" biblioteca.

La programación de la cirugía tuve que decidirla en dos minutos, el jueves antes de mi operación. Fue extraño. A todo el mundo le decía que quería operarme cuanto antes, que quizá el viernes o el lunes, pero, cuando la doctora me dijo que sólo bastaba mi aprobación para reservar el quirófano, sude frío. Quedé paralizado por un momento. Fue difícil. Fue un momento verdaderamente existencial, es decir, lo viví. Tuve conciencia de mi ser, de mi vida. Aceptar la cirugía implicaba una responsabilidad enorme. Es uno de esos momentos en los que realmente comprometes contigo mismo. (jeje, recuerden que soy algo exagerado)

Los exámenes pre-operatorios y la entrada al quirófano me esperaban. Todo iba normal hasta que me pusieron el oxígeno. En ese momento sentí realmente que sería operado. De fondo escuchaba "duranguense" y después "salsa". Luego, uno por uno entró el sequito de doctores que me intervendrían.

Lo que más recordaré es cómo mi pierna quedó prácticamente inerte. Fue sorprendente ver que los doctores la manipulaban y yo no sentía nada. ¿Aristóteles diría que mi alma abandonó por dos horas mi pierna? ¿A dónde fue? Si se fue, ¡¡¿por qué regresó?!! Si no se fue, ¿se durmió? Luego de todo esta serie de preguntas, me siento más tomista que aristotélico. (Damn!!)

En fin... hasta aquí dejo este asunto...


Ah, eso sí, que dolorosas son las inyecciones que me recetaron...

2 comentarios:

Guillermo Núñez dijo...

Ánimo Miguel, ojalá te mejores pronto.

david-. dijo...

¿Qué rollo? ¿Algún nuevo viaje existencial, por Saturnalia?